Recuperando la sabiduría ancestral: Un Programa Nacional de Presas Altoandinas para el Afianzamiento Hídrico

Presas altoandinas en la Región Ancash

Autor: Ronald Ancajima (30-abril-2024)

En el vasto paisaje de nuestra tierra peruana, se encuentran diseminadas joyas de ingeniería ancestral: las presas altoandinas. Estas estructuras, erigidas hace más de mil años por nuestros antepasados, continúan siendo testigos de la sabiduría y el ingenio que caracterizaban a las civilizaciones preincas e incas. Es hora de reconocer su invaluable legado y revitalizar su función en un mundo moderno que enfrenta desafíos hídricos cada vez más acuciantes.

Mensaje ancestral

Nuestros antepasados, que vivieron en armonía con la naturaleza y comprendieron su ritmo, dejaron una rica herencia de conocimientos y técnicas. Algunos de estos mensajes ancestrales, como bien lo narra Guaman Poma de Ayala en su obra «Nueva Coronica y buen Gobierno» (1615), nos hablan de la gestión del agua durante los meses de escasez. Ayala relata que durante noviembre, conocido como «Aya marcay quilla», había una gran falta de agua tanto del cielo como en las acequias que se secaban debido al fuerte calor y sol. Por ello, este mes era conocido como «chacra carpa y yaco uanay quilla», es decir, el mes para regar las chacras con agua de pozos o de represas. Durante este período, los Incas realizaban procesiones y penitencias en todo el Tahuaninsuyo.

Fuente: Nueva Coronica y Buen Gobierno (1615) Felipe Guamán Poma de Ayala

Evidencias prehispánicas: Ingeniería hidráulica milenaria

A lo largo y ancho de nuestro territorio, encontramos vestigios de represas construidas hace más de un milenio por las civilizaciones preincas. Estas estructuras, ubicadas estratégicamente en las alturas de la puna, demuestran una profunda comprensión del flujo hídrico y una habilidad técnica extraordinaria. Su permanencia a lo largo del tiempo nos habla de su eficacia y relevancia incluso en la actualidad.

A manera de ejemplo compartimos imagenes de la presa Collpa en la cuenca alta del río Nepeña (Jimbe)

Evidencias Recientes: El Potencial de las Represas en la Cuenca del Río Chancay – Huaral

En la cuenca del río Chancay – Huaral, empresarios visionarios tomaron la iniciativa hace más de 90 años de represar un conjunto de lagunas para asegurar el abastecimiento de agua durante los meses de escasez. Esta acción no solo ha demostrado ser efectiva, sino que también resalta el potencial de las represas altoandinas para mitigar los efectos de la sequía y garantizar la disponibilidad de agua para las comunidades a lo largo del año.

En las siguientes imágenes se muestran seis (06) lagunas de las más de 20 que se encuentran represadas para beneficio de la cuenca.

Además trasvasaron (trajeron) aguas de la cuenca del Río Mantaro (que pertenece a Junín), un volumen de 6 MMC, llamado el Sistema Puajanca. Inter-conectaron 5 lagunas con un canal, el mismo que cruza los andes a través de un túnel, llevando su preciosa carga a la cuenca del Chancay – Huaral en un claro ejemplo de Afianzamiento Hídrico.

En las siguientes imágenes se muestran tres de las 5 lagunas que componen el sistema Puajanca.

Propuesta: Programa Nacional de Presas Altoandinas

Inspirados en la sabiduría ancestral y en experiencias exitosas como la del río Chancay-Huaral, proponemos la creación de un Programa Nacional de Presas Altoandinas. Este programa tendría como objetivo:

  • Retener las aguas en las partes altas de las cuencas hidrográficas: Las presas altoandinas permiten aprovechar el agua de deshielo y las precipitaciones pluviales, almacenándolas para su uso posterior durante los períodos de sequía.
  • Recuperar y revalorizar el conocimiento ancestral: El programa debe basarse en las técnicas de construcción y gestión del agua desarrolladas por las culturas preincas, adaptándolas a las necesidades y tecnologías actuales.
  • Promover la participación activa de las comunidades y organizaciones de usuarios: El éxito del programa dependerá del involucramiento activo de las poblaciones locales en su diseño, implementación y manejo.

Conclusiones y recomendaciones

El agua es un recurso vital para el desarrollo sostenible del Perú. El Programa Nacional de Presas Altoandinas representa una oportunidad para:

  • Fortalecer la seguridad hídrica: Garantizar el acceso al agua para la población, la agricultura y la industria, especialmente en épocas de escasez.
  • Promover la agricultura sostenible: Asegurar el agua para el riego de cultivos, contribuyendo a la seguridad alimentaria y al desarrollo rural.
  • Conservar el patrimonio cultural: Revalorizar las técnicas ancestrales de gestión del agua y preservarlas para las futuras generaciones.

En conclusión, el Programa Nacional de Presas Altoandinas representa una oportunidad única para enfrentar los desafíos actuales en la gestión del agua. A través de la implementación de este programa, podemos aprender de la sabiduría de nuestros antepasados, adaptar sus conocimientos a nuestras necesidades actuales y garantizar un futuro más sostenible para las próximas generaciones.

Como recomendaciones finales, es importante que las comunidades y organizaciones de usuarios se involucren activamente en este programa, y que desde las instituciones se promueva su participación. Además, se debe seguir investigando y valorando las técnicas ancestrales de gestión del agua, para integrarlas en nuestras estrategias actuales. Finalmente, es necesario que se realicen acciones de sensibilización y educación sobre la importancia del agua y su cuidado, para asegurar su disponibilidad para las futuras generaciones.